Desde Selva Marine, una gama de fuerabordas con arranque eléctrico y batería integrada.
Los motores fueraborda de 6 a 10 caballos de fuerza representan un poco ese rango de potencia intermedia, cuyos motores ya son demasiado grandes para poder arrancar sin esfuerzo, y los botes que empujan todavía son demasiado pequeños para albergar una batería sin problemas.
Tener una batería a bordo del bote, la embarcación auxiliar o el bote que usamos para ir a pescar también significa administrar su recarga y el paso de los cables de alimentación para comenzar.
Selva Marine, que durante algunos años ya comercializaba «diez caballos de fuerza» con arranque eléctrico y batería integrada, por lo tanto, pensó en ampliar esta gama y ahora ofrece tres motores fuera de borda capaces de aliviar nuestros esfuerzos.
Estamos hablando de Oyster 6, Black Bass 8 y Piranha 9.9.
Las ventajas del arranque eléctrico con batería integrada
Las ventajas de tener una batería integrada y un arrancador eléctrico son múltiples y evidentes. Además del hecho de no tener que luchar tirando del cable del arrancador de arranque, esta solución protege todo de los agentes atmosféricos para que el mantenimiento del complejo sea cero, al igual que la instalación.
Tener la batería integrada también ahorra espacio y una mayor seguridad, especialmente teniendo en cuenta que no tendremos cables ni pesos alrededor de la embarcación. Una ventaja general que se multiplica en el caso de licitaciones, donde la batería externa complicaría enormemente la vida a bordo en los espacios confinados de un barco de servicio.
Los tres fuerabordas son de cuatro tiempos SOHC, de gasolina y equipados con encendido electrónico. La potencia es de 4.4 Kw para 6 hp, 5.9 Kw para 8 caballos de fuerza y 7.3 Kw para 9.9.
Refrigeración por agua con circulación forzada por bomba. En cambio, el desplazamiento es igual a 135 cc para el Oyster, 165 para el Black Bass y 181 para el Piranha.
El tipo de guía es una barra con un acelerador de perilla y la hélice estándar está conducida con tres palas con bloqueo silencioso incorporado para los tres motores que también están disponibles en versiones de mango corto, largo o extra largo.
El peso en seco es de alrededor de 26 kilos para el Oyster y el Black Bass y 30 para el Piranha. Por lo tanto, son fuerabordas ligeros y verdaderamente portátiles.
Los precios con IVA, que varían según el tipo de vástago y tanque, varían desde un mínimo de 1.319 euros para el Oyster, desde 1.379 euros para el Black Bass y desde 1.699 euros para la Piraña.
Lo que significa que, con estos precios, no es solo la buena voluntad lo que simplifica la vida.