Un tiburón mako salta y aterriza en el barco de una familia de pescadores

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Sucedió seriamente, a finales de julio en los Estados Unidos. Una familia estaba practicando su deporte favorito, la pesca en alta mar, cuando algo grande se enganchò en el anzuelo.

Después de luchar durante mucho tiempo con el pez, finalmente el hilo de pescar comenzò a regresar al carrete. Pero aquí está la primera sorpresa, no es un atún o una lampuga bajo el gran botín que la familia de los pescadores esperaba, si no un ejemplar de tamaño considerable de tiburón mako.

Cuando el tiburón mako “aterrizò a bordo”, tal vez tratando de liberarse, saltó fuera del agua y aterrizando en la cubierta del barco. Este tipo de tiburón es de hecho famoso por su propensión a realizar grandes saltos fuera del agua, pero que yo recuerde, no hay noticias de hechos como estos.

En la gravaciòn se pueden escuchar las discusiones animadas de la tripulación que no saben cómo deshacerse de la carga incómoda y peligrosa.


Squalo in barca 2

El tiburón lucha hasta quedar atrapado en el bolardo de acero del barco, tal vez retenido por la línea con terminal de acero que, todavía claramente visible en el video, retiene el tiburòn a bordo.

El video tiene una pausa, y ahi es que vemos que los pescadores logran deshacerse del pez dejándolo caer en el mar con un cabo que luego cortan. El tiburón reanuda su camino, no se sabe en qué condiciones.

Este tipo de tiburón es famoso no tanto por su tamaño, la hembra alcanza hasta cuatro metros de longitud, impresiona más por sus notables dientes. Basta con pensar que en el cartel de la famosa película «Tiburón», la dentadura del protagonista , el famoso tiburón blanco fue sustituida por la dentadura del tiburòn mako, mucho más aterradora.

Las fotos son bastante ásperas, al menos en lo que a nosotros respecta, no nos gusta ver un pez, incluso un tiburón que sangra e intenta sobrevivir. Por otra parte, la situación es obviamente accidental y peligrosa, pero honestamente, no sabrìa qué hacer en la misma situación.

Seguramente no intentaríamos «golpear» el animal, poner nuestras manos en esa boca sería extremadamente peligroso.

 

 

Luca D'Ambrosio

Editor-in-Chief and Journalist. With more than 30 years spent in the publishing industry and 20 sailing and racing with his boats Luca have a very deep working nautical knowledge.

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