Hombre al agua. estado de shock y tècnica de recuperaciòn

Una afermaciòn que a menudo se suele decir en las escuelas de vela estándar, es que una persona que cae en mar se considera perdida. Muy drástica, pero dramáticamente real.

Seguro que hay muchos casos de personas que caen en mar y son recuperadas. En la mayoría de los casos en condiciones óptimas: durante el día, en el verano, con el mar en calma.

Pero estas no son las condiciones en las que suele ocurrir el incidente. La emergencia casi siempre sucede en condiciones muy duras, cuando los movimientos en la cubierta son más difíciles debido al mar o más incierto, por la noche, debido a la oscuridad. A menudo, las dos cosas juntas.

Caer en el mar en esta condición es un grave accidente debido a las posibilidades de recuperación ,son mínimas.

Así que la primera declaración es una banalidad desarmante: en el mar no debemos terminar. Una banalidad que se puede evitar con un buen comportamiento. De noche, o en condiciones de mar muy áspero, los que están en la banera o haciendo maniobras debe ser legado a la línea de vida y debe usar un chaleco salvavidas posiblemente que en caso de accidente se infle en automàtico.

Pero igualmente, si se pierde una persona en el mar, debemos saber qué hacer.

«Hombre al agua … posiciòn y distancia … salvavidas en el agua … me alejo 60 metros … apoyo … viro de bordo en popa … Está bien (por desgracia) para pasar el examen para la licencia nautica. Esto es lo que nos dicen de hacer.

En la realidad, todo esto no tiene sentido. El verdadero objetivo es no perder el contacto con el náufrago, alejarnos lo menos posible, y retírelo del agua en el menor tiempo posible.

A través de los años hemos estado experimentando varias maniobras válidas (excluida la requerida para obtener una licencia de barco en Italia). Entre ellas, pero no es, por supuesto, un dogma, la llamada Quick Stop parece ser una de las más eficaces al punto de ser fuertemente apoyada por la ISAF.

Hemos probado la simulación de la emergencia en diversas condiciones y con alguna variables en función de la intensidad del viento (recoger o no el foque por ejemplo), nos pareciò rápido y técnicamente bastante simple.

Como se muestra en la imagen se trata de orzar y virar (posición 1). En esta etapa se puede sostener el foque a barlovento para acelerar la operación, o aprovechar la virada para calar las velas o enrrollarlo (posición 2).

En todos los casos, lo antes posible, es bueno enrrollar la vela de proa que en todas las otras etapas de la recuperación de sólo una gran molestia.

Importante: encender el motor haciendo máxima atención a que no hayan cuerdas en el agua. Se puede mantener parado para cuando tengamos que corregir las maniobras. Por otra parte, en el caso de una investigación fatal, Vaya y diga a un juez que quería hacer la recuperación a vela como si se tratara de una ejercitaciòn.

Efectuada la virada, se apoya y se regreza con el viento en popa (posición 3). La vela mayor puede quedarce cazada al centro obteniendo ayuda del motor, o la podemos dejar abierta un poquito para obtener impulso del viento. En poquisimo tiempo encontraremos nuestro naufrago, a poca distancia de nosotros. Superado con la popa, podemos orzar dejando la vela mayor en bando y acercandonos hacia el  náufrago que mantendremos sotavento para la recuperación.

Sobre la cuestión de dónde dejar a los náufragos hay diferentes ideas. Creemos que sotavento es mejor porque se reduce el riesgo de alejarse.

.La maniobra es bastante simple y la puntualidad con la que se puede ejecutar combate con dos grandes enemigos de esta emergencia: perder de vista el nàufrago  y la hipotermia que puede llegarle a la persona en el agua si no se hace pronto, lo màs rapido posible.

Con la temperatura del agua a 5 grados, una persona de corporaciòn media  vestida puede resistir flotando 30 minutos que suben a 3 horas antes de la aparición de los síntomas de la hipotermia si el agua llega a 15 grados. A 0 grados es una cuestión de pocos minutos.

Incluso el náufrago puede hacer algo para combatir la hipotermia o mejor para retrasarla: quedarse quieto y mantener la posiciòn de auxilio (para reducir el escape de calor Postura), es decir, asumir la posición fetal para dispersar el menos calor posible. Se dice que para quedarse inmobil y encogido se debe tener puesto el chaleco salvavidas. De esta manera se demostró que el tiempo de supervivencia se alarga de 35 a 50 por ciento.

Realizar la maniobra rápida, ser rapidamente activo a bordo, tiene un impacto en la situación emocional del náufrago.

Terminar en mar, ver el barco que se aleja, someterse a cambios bruscos de temperatura, el consumo de agua salobre,el  miedo a no ser recuperado. Todas las condiciones que hacen venir el pánico se materializan en pocos instantes, rompiendo la capacidad de reacciòn

Quien termina en el agua al contrario tiene que reaccionar, mantener la calma, si hay mal tiempo deve protegerce dando la espalda al viento y a las olas que podría reducir en gran medida la respiraciòn. En este cuadro tan dramático, ver que en el barco se estan haciendo  maniobras rápidas para la recuperación tranquiliza y aumenta la resistencia.

Hemos dejado apuesta por ùltimo el discurso del anillo protector, ya que el solo hecho de tenerlo a bordo y de ester en reglas con las normas, nos hace creer que todo está bien.

Las condiciones en las que la mayoría de las embarcaciones de los veleros de recreo en Italia hace el uso del anillo protector complicado. A menudo, la cuerda que «debe» ser colegada al anillo protector, es un bulto enredado que no se puede en ese momento desenredar para el lanzamiento. En el mejor de los casos el salvavidas se quedaría colgando en la popa.

En muchos otros casos, los anillos protectores estan guadados en bolsas que nunca han sido abiertas y sin ningùn tipo de manutenciòn. Abrirlas despuès de anos con reciduos de salitre es imposible. Probar a desenredar la cuerda naranja o tratar de abrir el zipper en una situación de emergencia es criminal porque se retarda en la operación de recuperación.

Por lo tanto, està bien(por no mencionar que se trata de un equipamiento obligatorio) tener el anillo protector atado a la cuerda de 30 metros flotante, pero esto es bueno que se enrrolle alrededor de un carrete que gire libremente. Además, una vez en el agua, es necesario tener cuidado de que la cuerda no se convierta en una trampa para nuestra hélice, y sobre todo tener en cuenta que si el sobreviviente no coje a tiempo el anillo protector, estando el vinculado al barco se alejarà con el. Por lo que no es malo tener un segundo anillo que no estè unido a la embarcación que posiblemente pueda ser lanzado en el agua y tenerlo el nàufrago.

En el mercado también hay kits para la recuperación del hombre al agua con la barra IOR incorporada muy útil para localizar el nàufrago.

Por último, aun suponiendo que la quick stop es la maniobra, o una de las maniobras más eficaces para la recuperación de hombre al agua, debemos darnos cuenta de que por cuanto la memoricemos, se trata de tener un poco padronancia. Debido a que en caso de emergencia, tenemos que correr o hacer funcionar bajo estrés. Así que, como en muchas de las cosas que riguadano nuestro deseo de mar, tambièn en este caso se debe estar preparado, de la única manera posible: mediante la simulación de la emergencia, repitiendo la maniobra y, posiblemente, olvidando lo que nos han enseñado para superar el examen de licencia de navegación.