Mar-co e-motion 36: bonito, malo y muy rápido.

El nuevo MAR-CO E-MOTION 36 marca inequívocamente la entrada, con pleno derecho, de MAR.CO MARINE COSTRUZIONI en el segmento de los Maxi-Ribs habitables de alta gama. De hecho, se trata de barcos que, construidos exclusivamente por encargo, se fabrican para satisfacer todas y cada una de las necesidades de sus afortunados propietarios, con unos estándares de construcción muy por encima de la media.

Y el modelo que vamos a probar hoy no es, desde luego, una excepción. Empezando por su librea completamente negra, creada con una doble capa de gelcoat (primera capa, cocción, segunda capa, segunda cocción), demuestra sin lugar a dudas que los más de 45 años de experiencia del astillero se han empleado en la búsqueda de una calidad que, más allá de las pretensiones, es decididamente tangible aquí.

Así que podéis entender lo ansiosos que estábamos por «meterle mano» a este Maxi-Rib tan especial que, para la ocasión, nos esperaba en las tranquilas aguas del lago de Garlate, trampolín de acceso al legendario brazo de Lecco del lago de Como.

¿Cómo es el MAR-CO E-MOTION 36?

Cuando se sube a bordo del nuevo MAR-CO E-MOTION 36, no se puede dejar de notar inmediatamente la calidad de su fabricación. Y no es sólo por esta combinación de colores que, seamos sinceros, es preciosa de veras, sino porque, mires donde mires, no encontrarás ni una sola imperfección. Las superficies se emparejan sin mancharse, las esencias son exquisitas y los componentes son de primera calidad.

El gelcoat que recubre la fibra de vidrio, por poner un ejemplo de la atención que el astillero dedica a la construcción, se aplica dos veces y, tras cada aplicación, se pasa al horno. Lo mismo ocurre con el T-Top que, otra obra maestra de la técnica de construcción, nace en la proa, haciendo un guiño a las líneas de clara inspiración automotriz, y llega a la popa con dos soportes tubulares de acero inoxidable, pintados en negro mate, que definir como hermosos sería un eufemismo.

Incluso los sofás del salón, así como los asientos de la bañera, denotan una atención al detalle inigualable. Están tapizados con un relleno de células cerradas y cubiertos con un tejido de alta calidad hecha a mano. Todos los bancos del salón tienen respaldos que se abren y que, además de aumentar el espacio de almacenamiento, albergan los polos de carbono de la tela de oscurecimiento que permite sombrear completamente la bañera, un accesorio que subraya la elegancia de este Maxi-Rib.

Ni que decir tiene que el techo de la cabina contiene una mesa retráctil eléctrica, que Mar-Co introdujo hace muchos años. Este mecanismo permite elevar la mesa que, en su posición intermedia, prolonga el sofá del salón hasta convertirlo en otro inmenso solárium.

El salpicadero de popa está decididamente sobredimensionado y oculta, en una superficie de teca de 10 mm, tanto la escalera retráctil como los tapones de embarque fluidos, que encuentran aquí su ubicación más «segura».

La cabina del MAR-CO E-MOTION 36 ofrece mucho espacio para dos personas que pueden así aprovechar una gran pantalla de navegación y todo el espacio necesario para insertar la ya inevitable instrumentación electrónica. Cabe destacar el panel de control que, como casi todo en el barco, está hecho a medida, según las peticiones de los propietarios. Detrás de la bañera, hay un bar portátil, con hornillas y fregadero, y una gran y útil nevera con cajón de 70L

El lado de babor conduce a la cubierta inferior, que esconde (desde el exterior no se ve) una suite del propietario muy grande. Nada más bajar, a estribor hay un verdadero cuarto de aseo con ducha separada (nunca visto en una embarcación de este tamaño), mientras que a la izquierda hay una pared equipada con muebles, armarios y una estantería.

Este conjunto alberga el panel de servicios, la caja fuerte, la cafetera y crea más espacio de almacenamiento precioso. Hacia la proa encontramos una cama king-size, que es grande y está rodeada de nichos de almacenamiento, llegando a la proa todavía lo suficientemente amplia como para acomodar, hábilmente oculto, un gran compartimiento dedicado a las bolsas de viaje (un toque de genialidad).

Incluso en este entorno es la calidad a dominar, la sensación de lujo es perceptible en todas partes, es realmente un barco para paladares refinados este MAR-CO E-MOTION 36.

Prueba del MAR-CO E-MOTION 36

La librea de este ejemplar MAR-CO E-MOTION 36 ya dice mucho de lo que podemos esperar hoy en día pero, por si no estuviera suficientemente claro, los tres Mercury Verado 400 expuestos en la popa, disipan en un instante cualquier duda residual sobre el propósito de este proyecto.

1.200 caballos de potencia, sobre un casco fabricado en infusión, que eleva el peso total en seco a sólo 3.200 kg, nos hacen presagiar unas prestaciones decididamente interesantes, para las que Mar-Co ha creado incluso un soporte a medida, diseñado para conseguir el equilibrio perfecto de estas líneas de agua.

Abandonamos el atraque con unos simples toques del Joystick Piloting de Mercury y luego engranamos la marcha de proa. Al ralentí, el maxi-rib avanza a casi 5 nudos sin ningún signo de balanceo, la anchura de 3,60 metros da a este barco una excelente estabilidad. Marco Zamuner pone el acelerador en 1 palanca y comienza a acelerar lentamente.

El MAR-CO E-MOTION 36 entra en el planeo casi inmediatamente, apenas pasando las 2.000 rpm, sin levantar la proa, un signo irrefutable de una excelente preparación. Adelantando poco a poco el acelerador alcanzamos las 3.500 rpm donde, a menos de 30 nudos, viajamos con comodidad casi total consumiendo poco más de 3 litros por milla, un rendimiento que nos permitiría ir de La Spezia a Capraia en unas dos horas, con un consumo definitivamente irrisorio…

Seguimos midiendo el rendimiento subiendo las revoluciones a 500 cada vez mientras el GPS marca velocidades cada vez más importantes y mientras me asombra cada vez más el hecho de poder seguir escribiendo tranquilamente en el cuaderno sin mancharme. A 5.000 rpm estamos a 45 nudos y parece que está parado, vuelvo a acelerar y pasamos de 50 nudos y luego, a 6.500 rpm, registramos un máximo de 56,8 nudos que, increíblemente, aún consigo anotar sin problemas.

Una vez terminadas las tareas de anotación por fin puedo ponerme a los mandos, me siento e instintivamente encuentro una posición perfecta, los pies en los reposapiés, la espalda apoyada en el respaldo y una perfecta visibilidad hacia delante, se nota que este barco está hecho por los que realmente salen a la mar.

Pongo el dispositivo de desconexión, advierto a la tripulación que se agarre bien y hundo los aceleradores sin mirar. La MAR-CO E-MOTION 36 despega como un cohete y me aplasta en el asiento, la aceleración es impresionante y el tronco parece haberse vuelto loco. En menos de 20 segundos volvemos a la máxima velocidad y, esta vez con el volante en la mano, siento una absurda sensación de estabilidad y seguridad, este maxi navega con un extraordinario trimado.

Todavía incrédulo, comienzo una amplia aproximación a la máxima velocidad, que el bote ejecuta sin inmutarse, luego reduzco la velocidad a unos 36/37 nudos y me aproximo con más decisión. Aquí las fuerzas G comienzan a hacerse sentir, pero el barco no se mueve, no insinúa ensancharse mientras yo, arropado en mi asiento de conductor, disfruto del espectáculo de un círculo perfecto realizado a esta velocidad.

La adrenalina sube y me empuja a atreverme cada vez más, a 30 nudos giro fuerte y traigo el E-MOTION 36 en un radio de giro absurdo, no tendrá más de 20 metros de diámetro y aquí hago dos o tres giros completos. Acelero para poner el bote en dificultad pero no quiere saber, parece en las pistas, ni siquiera se insinúa el meneo.

Contragiro brusco entre las miradas divertidas de la tripulación que, al igual que yo, disfruta de esta sesión de evoluciones al límite, con el mismo nivel de aprensión que sentiría al caminar por el paseo marítimo. La sensación de seguridad que transmite esta embarcación sólo es superada por el nivel de diversión que permite, ¡una embarcación auxiliar que es simplemente una locura!

Conclusiones

La MAR-CO E-MOTION 36 no es una maxi-rib para todos. Para poder apreciarlo, hay que ser capaz de comprender plenamente lo diferente que es de otros modelos que, no me malinterpreten, están a años luz de este nivel de perfección constructiva, de este concepto de calidad absoluta, que impregna cada uno de los componentes.

Por supuesto, por sus cualidades de casco es también un maxi-rib muy fácil de conducir y por esta razón adecuado para el crucero con la familia (o amigos) pero, comprarlo sin reconocer sus peculiaridades, sería un poco como comprar un AMG y luego usarlo para ir de compras…

Hay mucho más en este MAR-CO E-MOTION 36, mucho, mucho más.

Resultados de las medidas

Características técnicas