Mercury V8 y V6. Salto cuántico, en otra dimensión, para los nuevos fuerabordas de Mercury Marine. Prueba comparativa

Mercury V8 y V6: potencia y control (electrónico)

Es un momento histórico en casa Mercury Marine. La suma de las dos innovaciones recientes, el lanzamiento del nuevo V6 de 3.4 litros en Miami en febrero y la presentación en estos dias de los nuevos Mercury V8 4.6 litros, sin duda cambia la fisonomía del mercado.

El paso adelante que ha hecho Mercury Marine para hacer realidad estos dos nuevos motores es simplemente epocal. La inversión de mil millones de dólares desplegadas por el gigante estadounidense que merece ser recordado, es el único fabricante del mundo que està centrado sólo en la nàutica, ha dado lugar en un resultado que, como veremos a partir de las pruebas, supone una mejora adicional y maximiza todas esas características que ya habían hecho famoso los fueraborda estadunidenses.

Sintéticamente, podríamos describir el nuevo Mercury como la exaltación, desde todos los puntos de vista, de la serie anterior. Más esfuerzo de torsión y más aceleración van increíblemente codo con codo con una reducción de peso y un consumo excepcional que, y este es el verdadero milagro, se hacen frente a un aumento en el desplazamiento que, entre otras cosas, establece el escenario para una fiabilidad incluso mayor que la ya buena de los modelos anteriores.

Mercury también tiene una característica que realmente aprecio en un constructor, cuando lanza un motor lo hace simultáneamente disponible para las pruebas.

Es un signo de gran seriedad y, sobre todo, hace que la novedad sea inmediatamente tangible.

Lo que sigue es el informe de un día de prueba en el que tuvimos la oportunidad de probar todos los nuevos fuerabordas, sin límite de tiempo y en su elemento natural.

La prueba de los nuevos Mercury V8 y V6

Nos esperaba un gran despliegue de embarcaciones y fuerabordas en Baveno, la sede de esta prueba que, incluso por un factor dimensional, no tiene precedentes. Hasta 20 barcos en el agua, equipados con toda la nueva gama de motores fuera de borda. Mercury realmente usa los nuevos grupos térmicos donde las características de uso de cada línea individual los hacen más adecuados, solo eche un vistazo a la siguiente tabla para entenderlo fácilmente.

Los motores son personalizados según las peculiaridades de la línea, por lo que, solo para poner un ejemplo, el 300 caballos de fuerza V8 de 4.6 litros que equipa el FourStroke estará configurado de forma diferente, tanto electrónicamente como mecánicamente, por su equivalente montado a bordo del Verado 300.

Hecha esta premisa, veamos cómo nos fue con los motores que probamos.

Prueba Mercury Verado 300 – V8 de 4.6 litros a bordo del Prince 30 de Nuova Jolly

Un par de Verado 300, con librea negra, nos estaba esperando en el muelle. Instalados en la popa de un Prince 30 de Nuova Jolly, apenas pueden oírse mientras murmuran al mínimo. Subimos a bordo y partimos lentamente, somos seis y este bote pesa más de dos toneladas en orden de marcha. El piloto nos lleva afuera mientras nos muestra los sistemas electrónicos a bordo. Para equipar este bote inflable encontramos el sistema de pilotaje Joystick y el Active Trim, una razón más para probarlo al màximo.

Con la dosis habitual de escepticismo, pido de realizar la clàsica prueba de velocidad/ rev del motor/consumo y, a medida que aceleramos, me doy cuenta de que las velocidades son estelares. Ya a 4.500 rpm estamos por encima de los 40 nudos y, considerando que este es un motor que genera 6.000, me agarro firmemente a los pasamanos y continúo observando mientras el registro de GPS sigue aumentando.

A 5.500 rpm estamos por encima de los 50 nudos, pido de acelerar al máximo y, en 6000 tenemos la increíble velocidad de 56,7 nudos con el Active Trim que, siempre de forma automática, realiza perfectamente su trabajo, dejando libre al driver de centrarse en todo lo que, dada la velocidad, nos orbita rápidamente alrededor.

Ahora es el turno de las pruebas de aceleración y el piloto nos recomienda que nos mantengamos bien. Estoy a punto de decirle que pruebo 50/60 barcos al año y que este, por cierto, ya lo probé pero, afortunadamente, estoy en silencio y solo tengo tiempo para aumentar el agarre al pasamanos porque con una mano sola no habría sido suficiente. ¡La aceleración a la que estoy sometido es simplemente una locura! Me doy vuelta, miro a mis colegas y me doy cuenta de que, como yo, no han podido cronometrar los tiempos.

Necesitaremos tres pasajes para grabar correctamente los tiempos de aceleración, parece de estar en la carretera y no a bordo de un barco por lo tanto que es el «grip» que los nuevos Verado, las hélices Enertia de 21′ el Active Trim, logran alcanzar en agua. Pasamos de 0 a 50 nudos en 9.06 segundos y, en lo que a mí respecta, este es un récord absoluto con este tipo de embarcaciòn.

Dada la aceleración, solo tenemos que probar el conjunto fueraborda-hélices-active trim, una serie de giros cerrados, realizados entre 25 y 30 nudos en ausencia total de cavitaciones, confirma cuanto avanzado e indispensable sea el sistema Active Trim.

Por otro lado, solo observe el movimiento de los pies mientras nos damos cuenta de la rapidez con la que Active Trim realiza los cambios de actitud. Ni siquiera un pulgar biónico podría hacerlo mejor en estas condiciones, mejor dejar esta tarea a la electrónica, mientras que solo nos ocupamos de conducir, acelerar y ralentizar con el acelerador electrónico en modo simple.

Pruebo de nuevo la velocidad y la pongo en relación con el consumo, a 32 nudos el mejor rendimiento, solo 1.67 litros para cubrir una milla, increible. Para que quede claro, todos los motores, a esta velocidad, consumen menos de 27 litros/hora.

El rendimiento a 40 nudos es aún más impresionante donde, a una velocidad de crucero muy alta, los dos Verado 300 consumen 2.23 litros por milla, en práctica podríamos ir desde La Spezia hasta la Isla de Elba en dos horas, a un costo muy contenido.

Volviendo al amarre, probamos el Joystick Piloting System. El mando realiza dos funciones, si lo operamos moviéndolo, empuja el bote en la dirección deseada (cualquiera esa sea); si en cambio lo dejamos rotar sobre sí mismo, desencadena el movimiento giratorio alrededor del eje del barco.

Todo es muy simple e intuitivo, solo unos segundos para cogerle la vuelta y el resultado final es una maniobrabilidad excepcional. Los movimientos del barco ya no se limitan a las 4 direcciones, el joystick permite, de hecho, movimientos diagonales que antes simplemente eran imposibles.

El Joystick Piloting System, entre otras cosas, permite evitar la instalación de dos optional muy caros: el piloto automático y el propulsor de proa, cuya instalación se vuelve inútil con este sistema. Instalar el Joystick podría representar un ahorro, en comparación con la compra por separado de los dos opcionales.

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Prueba Mercury Verado 300 – V8 de 4.6 litri – a bordo del Axopar 37 Sun Top

Nuestra segunda prueba es a bordo de un Axopar 37 Sun Top. También impulsado por un par de Verados de 300 caballos de fuerza, nos da la oportunidad de probar el rendimiento del Mercury V8 montado en la popa de un buque más pesado. Con un peso seco de aproximadamente 3.600 kg, el tanque del 70% y 8 personas a bordo, este crucero deportivo fue el anfitrión de la prueba más dura del día, con un peso total de unas cinco toneladas.

Sin embargo, la fatiga no parece ser un problema para el nuevo Verado V8 de 4.600 cc que puede, muy rápidamente, empujar el bote a una velocidad máxima de más de 46 nudos. Por supuesto, aquí el consumo aumenta un poco «pero, por otro lado, estamos en un yate con cabina que, montando el fueraborda en lugar de un motor interno, permite, entre otras cosas, tener màs espacio para una segunda cabina de popa, llevando así el total de las camas disponibles a 4.

Montados a bordo del Axopar 37, los Verado muestran la mejor relación rendimiento/consumo a 25/30 nudos donde, entre 3500 y 4000 rpm, pueden viajar alrededor de 2.5 / 2.6 litros por milla, mucho menos de cuanto consuma normalmente un crucero de cabina de este tamaño. Aquí, también, la aceleración es considerable, a pesar del peso logramos alcanzar 30 nudos en solo 9.7 segundos.

Conclusiones y tabla comparativa del rendimiento detectado con los nuevos Verado 300 V8

Ya lo habràn entendido, es realmente muy difícil no decir que acabamos de probar uno de los mejores fuerabordas de la historia. Rápido, sorprendente, ligero e insospechado en el consumo. Otro detalle digno de mención es la integración cada vez mayor con la electrónica de a bordo que, con el perdòn de los puristas, es cada vez más esencial. La brecha de rendimiento, consumo y seguridad resultante de la adopción de estas herramientas no es colmable, incluso con la experiencia del comandante más experto.

Además de dar un paso adelante, este es un salto cuántico, en otra dimensión.

Prueba Mercury SeaPro 200 – V6 de 3.4 litros – a bordo del NJ 800 Pro de Nuova Jolly

La línea SeaPro de Mercury Marine está dedicada al uso intensivo de botes profesionales o para aquellos que, siempre con un bote lleno y utilizando el bote mucho más de lo normal, buscan un motor que tenga estas características. Caracterizados por un par muy bajos, estos motores me convencieron por su capacidad de «salir del agua» muy, muy rápido, el NJ 800 Pro (versión profesional del famoso NJ 800) en el que realizamos la prueba.

Debe decirse que estos motores, a pesar de estar diseñados para lo que acabamos de describir, siguen siendo Mercury, así que cuando aumentè la aceleraciòn, aún era incomparable. Así que no esperes la clásica «mula de trabajo», que paga sus características con una disminución en el rendimiento, porque Mercury no logra realizar motores que no sean incluso divertidos, y mucho además.

Y de hecho, incluso si acabamos de pasar la prueba del Verado 300, disfrutamos de mucha diversión con este bote que, reforzado para uso profesional, pesa 1.5 toneladas que subieron a más de 2 durante nuestra prueba visto que estabamos en 6 a bordo y teníamos el tanque casi lleno. Y sin embargo, incluso en estas condiciones, el nuevo 3.400 centímetros cúbicos V6, a pesar de la aceleración y la velocidad a la que lo hemos sometido, ha demostrado ser extremadamente silencioso.

Este par de motores encuentra su régimen de operación ideal entre 3.000 y 3.500 rpm donde, deslizándose entre 25 y 30 nudos, consume poco más de 1,5 litros por milla. Un rendimiento muy interesante, especialmente para aquellos que lo eligen para trabajos pesados.

Prueba Mercury FourStroke 225 – V6 de 3.4 litri – a bordo de XO 270 Cabin de XO Boats

Ya tuvimos el privilegio de probar, en primicia mundial en Miami, el Mercury 225 V6  de 3.400 centímetros cúbicos de desplazamiento y, ya en esa ocasión, a pesar del bote en el que estaban montados que no nos había gustado en absoluto, estábamos emocionados.

Probados ahora a bordo de un bote mucho mejor, es decir, el XO 270 Cabin, que navega muy bien, solo podemos confirmar que son excepcionales. La aceleración, el par y el consumo, incluso en este caso dramáticamente bajo, elevan una vez más, la barra de las expectativas de cualquiera que tenga la suerte de navegar sobre el.

Como verán en la siguiente tabla comparativa, que relaciona los datos encontrados en Miami en el Boston Whaler, con los detectados a bordo del XO 270 Cabin, estos nuevos Mercury V6 ofrecen un rendimiento y una economía de operación sin precedentes.