Esta es una temporada de grandes éxitos para Franchini Yachts, el astillero que ha sacudido el mercado con el innovador Mia 63, destinado a repetir el éxito de los modelos anteriores del histórico astillero italiano, famoso en todo el mundo por la serie: «Emozione«. Hoy, de hecho, hay noticias de un nuevo concesionario, con sede en Alicante y sucursales en todo el Mediterráneo y Oriente Medio, que se ocupará del desarrollo de la internacionalización de la red de ventas.
Una colaboración estratégica que, partiendo del encantador escenario de las Islas Baleares, permitirá aFranchini Yachts Mia 63 unirse a la gran flota de Franchini Yachts siempre presente en los puertos más prestigiosos del Mediterráneo. «Estamos orgullosos de poder ver otro Mia 63 navegando en las Islas Baleares. Tras el parón impuesto por la pandemia«, dice Massimo Franchini, «el astillero vuelve a funcionar y la producción no para«. En estos momentos se está construyendo un nuevo Mia 63 en versión SportFly que, manteniendo el atractivo diseño que caracteriza a toda la gama, consigue añadir un puesto de conducción elevado y dotar a la embarcación de una cubierta principal cerrada adicional.
El despliegue de fuerzas para los salones náuticos de septiembre también es notable. De hecho, Franchini Yachts ya ha confirmado su presencia tanto en el Cannes Yachting Festival como en el Salón Náutico de Génova, dos oportunidades ineludibles para conocer de primera mano la calidad de construcción que expresa este astillero y que tuvimos la suerte de ver en primicia el año pasado.
Franchini Yachts y el Mia 63: tecnología y sostenibilidad
El Mia 63 de Franchini Yachts no es sólo diseño y belleza, todos los yates se construyen con el máximo respeto al medio ambiente y utilizan materiales y soluciones de vanguardia, que permiten niveles muy altos de sostenibilidad. En la formulación de las resinas, gracias a un proceso patentado que utiliza la nanotecnología, se obtienen estructuras más rígidas y ligeras con una importante reducción de las vibraciones.
Además de garantizar la perfecta maniobrabilidad del yate, el uso de la propulsión IPS asegura que los niveles de emisiones se encuentran entre los más bajos de la historia, a la vez que se mantiene el rendimiento en niveles óptimos. Por último, la implementación de las nuevas variantes Hard top y Fly en la línea de producción demuestra la capacidad del astillero de modular el yate según las necesidades del propietario, haciendo que cada Mia 63 sea diferente de la otra, según la lógica «Taylor made» que siempre ha caracterizado la producción de Franchini y que suele reservarse para yates de dimensiones mucho mayores.
