Mantenimiento de los tubos de bote neumàtico: consejos para evitar los errores más comunes
Si no es una ciencia exacta, no nos falta mucho. El mantenimiento de los tubos requiere un cuidado escrupuloso y un procedimiento casi científico que muchos propietarios de botes nunca han considerado, salvo que se den cuenta, después de unos años, Que su barco no es tan impecable y deslumbrante como cuando salió del astillero por primera vez.
Obviamente el agua, en particular la marina, con su fuerza corrosiva, y los agentes externos contribuyen inevitablemente a deteriorar el tejido, ya de por sí delicado, de los tubos.
Es por eso que un mantenimiento constante y correcto es indispensable si se quiere preservar el propio bote en buenas condiciones incluso con el paso de los años.
En este sentido, Antonio Aiello, director de producción de Nuova Jolly Marine, famosa marca especializada en embarcaciones neumáticas de 5 a 13 metros, Explica cómo cuidar metódicamente los tubos y evitar así los errores más comunes cometidos y a menudo irremediables.
El lavado de los tubos
El lavado del tubo es el primer paso fundamental, operación que debe realizarse a la sombra o al menos al abrigo del sol.
Aiello sugiere el uso de la nueva magia de Blue Marine, producto específico para los botes, pero también el desengrasante Shelly MA-FRA, disponible en todos los supermercados, es muy bueno para una limpieza a fondo.
Es importante limpiar el bote en seco porque estos productos tienen más eficacia sobre superficies secas, en lugar de mojadas.
Proceda de la siguiente manera. Rocíe el desengrasante o desgrasador sobre no más de 55 centímetros de tubo. Pasar con la esponja de sartén, para entender que por un lado es amarillo y por el otro es verde. Con la parte amarilla, que es abrasiva, frotar con más decisión los colores muy brillantes, como el amarillo o el naranja, hasta obtener la espuma: esta operación de frotamiento se debe realizar, centímetro por centímetro, en no más de medio metro de tubo a la vez.
Una vez terminado el frotamiento, seque la espuma que se ha formado y elimine la suciedad con paños de algodón. Enjuagar los tubos con una manguera de agua y volver a pasar todo el bote desde el principio, siempre con la parte amarilla de la esponja. Utilizar agua abundante: esta segunda operación de enjuague sirve para eliminar los posibles residuos del producto que hemos utilizado.
El lavado de la teca, de la fibra de vidrio y de las piezas de acero.
Si la teca está muy sucia, utilice papel con grano 150 o 240. Luego, retire la suciedad frotando suavemente con el papel y mientras tanto mojar la superficie con agua: esta operación, a diferencia de los tubos, se realiza con teca húmeda.
Para eliminar las manchas o las estrías negras que a menudo se forman en las partes de fibra de vidrio o en las sentinas, hay que utilizar el desengrasante o el desengrasante y la parte abrasiva de la esponja utilizada también para los tubos.
En este caso, las superficies a limpiar también pueden estar mojadas: no es necesario que estén perfectamente secas antes de la operación.
Los aceros pueden presentar una pátina que parece herrumbre: esta, si se ha consolidado de manera consistente sobre la superficie de acero, puede ser eliminada con la pasta abrasiva para carrocería.
Mantenimiento de los tubos de un bote: cómo eliminar el moho
Un problema que se plantea con frecuencia durante el período de almacenamiento es el del moho: Smuffex, de Blue Marine, es el producto más indicado para eliminarlo con éxito.
En una balsa seca, rocíe el Smuffex uniformemente sobre la tubería. Deje actuar el Smuffex durante 20 minutos. Repita estos dos pasos tres veces.
Con la parte verde abrasiva de la esponja y provisto de guantes de látex (el Smuffex contiene lejía) raspar centímetro por centímetro sobre el moho. Enjuagar bien y aplicar una cera en la parte donde se ha intervenido.
En caso de que aún quedara alguna mancha de moho, repetir la operación con unos días o incluso una semana de diferencia, dependiendo del grado de moho que se haya generado en el tubo.
Son varias las causas que llevan a la expansión de los hongos, que a menudo se desarrollan si el bote ha sido cubierto durante demasiado tiempo con una lona a través del cual no puede respirar mucho aire, o si se coloca en un área cerca de una acería o un vertedero.
Mantenimiento de los tubos de un bote neumàtico: cómo reparar los escotes
Para reparar cualquier escote en las juntas de los tubos, hay que utilizar un pegamento universal: especialmente recomendado el Bostick.
Dentro de un frasco vacío, poner un poco de pegamento, añadir un 6/7% de catalizador (generalmente incluido en el paquete de pegamento), agitar la amalgama con una brocha y aplicar el pegamento sobre los puntos de descollamiento, Poner una cinta adhesiva en el punto preciso donde va a pegarse, para evitar ensuciar las partes adyacentes.
Con papel de grano 80 raspar la parte descolada. Limpiar con un diluyente o con acetona y con el pincel, si es necesario, volver a aplicar el pegamento para reforzar la fijación.
Esperar 20 minutos y luego aplicar un poco de pegamento, haciendo presión sobre la articulación que se había desprendido, tal vez con ayuda de un trozo de madera, redondeada y sin bordes para no rayar el tubo.
En la fase de realización de los tubos, explica Antonio Aiello, el tejido total se corta en secciones, que son en total siete: las dos secciones de popa, que constituyen el cono terminal; la parte oblonga del tubo, de derecha e izquierda, formado por la parte superior y la parte inferior; finalmente la sección de proa. En cada una de estas piezas hay las superposiciones destinadas a los diversos encolados.
El tejido del tubo, en cambio, está compuesto por tres estados: en el exterior el hypalon, en el interior la trama y debajo de ella el neopreno. La trama es una fibra que, después de un año o dos de edad de la balsa, podría crear algunas hebras. Para quemarlos y eliminarlos de las juntas, se puede utilizar un secador industrial a unos 500 grados de temperatura.
