Franchini Yachts ha anunciado el inicio de la producción del Mia 63 T-Top all around, una evolución del emocionante Mia 63 que ha conquistado tanto al público que el constructor ha decidido perfeccionar aún más su obra maestra. «El Mia 63 T-Top all around, que estará listo el próximo mes de septiembre, nació como una confirmación de la idea de un ‘open habitable'», explica Massimo Franchini, «es decir, capaz de combinar la cubierta al aire libre con los interiores de un verdadero yate a motor.
Muy apreciado por el público y los clientes, el Mia 63 cuenta con una distribución interior ampliamente modulable, que ofrece hasta tres camarotes, además del camarote de la tripulación con baño y entrada independiente desde la cubierta, que puede amueblarse en diferentes configuraciones, para una superficie total de 55 metros cuadrados bajo cubierta. Los interiores y el mobiliario se adaptan a una gran variedad de necesidades y el diseño se ha estudiado para favorecer innumerables personalizaciones, siguiendo el concepto de semipersonalización que se aplica normalmente a los superyates. También es muy interesante la técnica de construcción, que implica el uso de nanotecnología en la formulación de resinas mediante un proceso patentado que permite obtener una estructura más rígida y ligera, al tiempo que reduce las vibraciones y la propagación del sonido.
Por todo ello, el Mia 63 ha conquistado a los aficionados a la náutica, hasta el punto de que Franchini Yachts ha decidido posponer el desarrollo de la gama en las versiones hard-top y sport-fly para dotar a esta primera línea de todas las mejoras necesarias para hacer el barco aún más funcional y agradable: Así nació el Mia 63 T-Top all around, que ofrece un parabrisas envolvente que protege del viento y del mar incluso cuando se navega en alta mar en todas las condiciones, dando la misma protección y seguridad que un barco cerrado pero sin quitar la sensación de libertad típica de los barcos abiertos del Mediterráneo; una cubierta aún más aireada y limpia, en la que se acentúan los recorridos de popa a proa para llegar a todos los puntos de la embarcación sin obstáculos; la bañera de proa es más amplia y está más resguardada, el hard top se alarga en la popa, y los espacios que dan servicio a la cocina y al puente de mando son aún más funcionales y ergonómicos. «Al mismo tiempo», subraya Franchini, «se han incrementado aún más los espacios de estiba y los compartimentos técnicos bajo cubierta para permitir que las familias o los grupos de amigos pasen largos periodos a bordo, ya sea navegando, en puerto o fondeados, al tiempo que se incrementa la autonomía y las prestaciones gracias a los nuevos motores Volvo IPS 1350, capaces de llevar el barco hasta el umbral de los 40 nudos con total seguridad y confort».
El barco, que nació casi como una «provocación» para el Cantiere Navale Franchini, mundialmente conocido por su estilo clásico y de perfil bajo, se está convirtiendo en una embarcación polivalente capaz de marcar el futuro del histórico astillero italiano.